DESARROLLADORA: Pandemic Studios
DISTRIBUIDORA: Electronic Arts
VERSIONES: PC, PS3, Xbox 360
FECHA DE LANZAMIENTO: 03.12.2009
VERSIÓN ANALIZADA: PC
DE SEGUNDA FILA
Disfrutar de un juego como a The Saboteur a día de hoy resulta una experiencia que requiere de cierta implicación por parte del jugador. Sí, hay que hacer un evidente esfuerzo, que para unos usuarios será demasiado, y para otros una regresión natural y hasta placentera en determinados aspectos. El sandbox desarrollado por la extinta Pandemic Studios se esfuerza en recopilar todas las mecánicas jugables del género de manera más o menos acertada, bajo un envoltorio con tanta personalidad como la II Guerra Mundial, un periodo histórico que ha sido revisitado hasta la saciedad en géneros antagonistas como la acción y la estrategia, y que al sandbox le queda como un guante.
The Saboteur te traslada nada menos que al periodo de la ocupación nazi de Francia durante la II Guerra Mundial. Sean Devlin, el protagonista del juego, es un piloto de carreras irlandés que se ve sorprendido por la invasión alemana, y por circunstancias que se cuentan durante el prólogo, entra a formar parte de la resistencia francesa. A partir de ese momento dará comienzo una lucha desde la clandestinidad con el objetivo de hacer el máximo daño a los opresores, lo que incluye sabotear cualquier tipo de instalación que haya por París y alrededores. Una ciudad cuyos distritos ocupados por los nazis están bañados de colores grises que solo recuperarán su viveza natural tras castigar indiscriminadamente a los alemanes allí apostados.

Se nota que The Saboteur es un juego ambicioso que intenta abarcar mucho, y que desgraciadamente no termina de cuajar bien en algunas facetas. Como buen irlandés, Sean es un tipo que se atreve con todo, desde pasar desapercibido cual Sam Fisher, hasta escalar edificios al más puro estilo Assassin's Creed, o liarse a tiros como si de Marcus Fenix se tratase. Lo malo es que la ejecución de todas esas posibilidades resulta bastante mejorable. El sistema de coberturas durante los combates es tan errático que merece más la pena ir a pecho descubierto pegando tiros a diestro y siniestro; las escenas de infiltración resultan demasiado rígidas y el citado problema con las coberturas tampoco ayuda; y la lentitud de la escalada le quita gran parte del atractivo que pudiera tener. Además, a día de hoy es un juego que presenta unos cuantos bugs no corregidos de manera oficial. Por ejemplo aun eligiendo el mando de Xbox 360 como controlador por defecto, tienes que "luchar" contra abundantes interferencias que produce el ratón; o el mapa que cuenta con una doble capa que se descuadra al hacer zoom sobre él, resultando un engorro seleccionar correctamente la ubicación del siguiente objetivo. Afortunadamente la comunidad ha tomado cartas en el asunto, y en este enlace puedes encontrar soluciones a varios de dichos problemas.
Donde el juego acierta plenamente es en la ambientación, y no es desde luego por la parte técnica, la cual solo se puede calificar de simplona incluso en el momento en que fue lanzado. Un juego como Grand Theft Auto IV lanzado un año antes, mostraba una la complejidad técnica varios peldaños por delante de la vista en The Saboteur. En este las texturas son borrosas, los vehículos no sufren deformaciones, las físicas son mediocres, la cantidad de cosas en pantalla es bastante limitada... Y aun así el juego tiene un encanto especial como pocos juegos son capaces de transmitir. La decisión artística de oscurecer las zonas ocupadas por los nazis en la que solo destaca el color rojo de los objetivos, unida a la excelente selección musical compuesta por conocidas piezas de la época, consiguen trasladarte a aquellos días de tragedia y al mismo tiempo esperanza de una manera brillante. Ver cómo el cielo cambia ese grisáceo constante por el típico Sol parisino tras completar una serie de misiones de un distrito, supone todo un acto de liberación, nunca mejor dicho. Solo falla la ausencia de traducción de textos al castellano, aspecto al que nuevamente pone solución el famoso Clandlan.
Como comentaba en el primera párrafo, The Saboteur no es un juego para todo el mundo. No está especialmente pulido en cuanto a mecánicas jugables, tiene bugs más o menos soportables, y técnicamente es más bien simplón. A cambio tienes un título muy bien ambientado, con un desarrollo de misiones muy conseguido, y sobre todo, que no intentar llevarte de la mano en cada acción que has de realizar. Y diría que solo por estas razones sigue siendo un juego muy a tener en cuenta, a pesar de su edad y evidentes defectos.
Buena ambientación.
Desarrollo de misiones abierto.
LO PEOR
Técnicamente soso.
No está traducido al castellano.
Bugs no solucionados oficialmente.
6/10
Creeping.
Aquí tienes la traducción del juego ... Imagino que seguirá funcionando:
ResponderEliminarhttp://academia.clandlan.net/?page=academia/view&id=313&title=Traduccion_The_Saboteur
Sí, si lo pongo en el análisis. Si pinchas en la palabra Clandlan, que está en rojo, te lleva directamente a la traducción.
EliminarSaludos.